Desde la década de la llegada de Mike Plant a la navegación profesional en alta mar a mediados de la década de 1980, COYOTE sigue el audaz espíritu de Plant mientras desafía tanto a la Madre Naturaleza, en todo el mundo en un velero, como al dominio francés en el deporte. Crónicamente carente de fondos y de personal, la sed de aventura de Plant y la creencia intrépida en sus sueños lo llevan a convertirse en un héroe estadounidense del mar. Sus ojos azules salvajes y su aspecto juvenil hacen que sea difícil considerar la vida de Plant antes de la navegación competitiva que incluye una caminata en solitario por Sudamérica, un escape de Interpol por un cargo de narcotráfico y tiempo tras las rejas en una prisión portuguesa. Sin embargo, estas hazañas y otras revelan el tipo de alma inquieta capaz de conquistar solo los océanos del mundo. A pesar de todo lo que logra en la navegación, el corazón de Plant nunca está satisfecho. Su creación final, Coyote, una embarcación de diseño radical construida al borde de la velocidad y la seguridad, simboliza el curso de la vida de Plant: correr ante el viento, siempre con la vista puesta en el mar